Uruguay fue sede de la primer Cumbre Global de Enoturismo responsable, establecida por la Organización Internacional de Enoturismo OMET, contando con la presencia de su presidente, el español José Antonio Vidal. Los organizadores Nacionales del evento fueron Ministerio de Turismo -Uruguay Natural, Intendencia de Maldonado, Enoturismo Uruguay, Instituto Nacional de Vitivinicultura – INAVI, Universidad de la República (UdelaR), Universidad Tecnológica del Uruguay (UTEC), Asociación de Enólogos del Uruguay, Asociación de Sommelier y la Asociación Nacional de Enólogos.

Las actividades se desarrollaron en los salones del Hotel Enjoy, Punta del Este, que desde hace años viene haciendo una apuesta muy fuerte en generar eventos vinculados con el sector del enoturismo.

El evento contó con 80 disertantes de 16 países, especialistas en diversas áreas, paisaje vitivinícola, patrimonio, cultura, comercio, negocios, branding, turismo, contando con representantes de sectores públicos privados y académicos. En los salones del hotel, se instalaron stands de múltiples bodegas Nacionales e Internacionales, Organismos Públicos y Privados, ofreciendo la posibilidad de intercambio entre todos los diversos operadores.

A lo largo de las tres jornadas se destacó la importancia que adquiere el enoturismo como dinamizador económico, social, protector del patrimonio cultural de las regiones como así también del ambiente en que se ubican los viñedos y bodegas.

Asimismo, La Cumbre generó un espacio único para presentar al mundo los casos de éxito de destinos y empresas, en el que los sectores académico, empresarial y gubernamental intercambiaron sus experiencias durante el congreso, en la zona expositiva y en las rondas de negocios.

Este proyecto, se viene gestando, hace 4años, cuando José Antonio Vidal convoco a referentes del sector para organizar esta Cumbre, pero coincidió con la Pandemia, siendo la peor crisis de la humanidad para el Turismo, pero en palabras de los Organizadores; cuando se llegó al piso se subió muy rápido, las personas querían volver a hacer turismo, y el enoturismo cuenta con la ventaja de contar con espacios abiertos, siendo el turismo del vino, uno de los segmentos que creció más rápido.

Las vivencias turísticas y enoturísticas tienen muchas formas de dejar huella emocional en el viajero, de convertirse en memorables, en auténticas experiencias, desarrollando la creatividad y el conocimiento, generando estímulos físicos o provocando sentimientos de arraigo e identificación social, o todo ello a la vez: emocionando. El objetivo es generar experiencias únicas, crear consumidores habituales que sean promotores de estas actividades, que potencian a las comunidades locales y a toda la cadena de valor.

Los consumidores de Enoturismo, terminan siendo grandes embajadores de las bodegas, de los establecimientos, de sus propios países y destinos. Las bodegas no están ubicadas en los centros y capitales, están en lugares a veces un poco alejados o que no tenemos fácil acceso, pero allí existen poblaciones locales que necesitan de la vitalidad de nuevas formas de acceder a empleos y desarrollo social.

En Uruguay se viene consolidando la actividad, no solo con las bodegas y viñedos que ofrecen, catas, degustaciones, visitas guiadas, experiencias gastronómicas, hotelería, sino con muchas personas del sector público y privado que lo está impulsando.

Conscientes del impacto ambiental de los eventos, desde OMET se adopta un enfoque integral de prácticas responsables y accesibles para un futuro sostenible: sedes, proveedores y patrocinadores comprometidos con la gestión de residuos, la huella de carbono, la gastronomía local y, cómo no, con la formación y concienciación a través de un evento como la Cumbre OMET sobre Enoturismo Responsable con temáticas y oradores de primer nivel internacional.

 

Uruguay está dando un paso trascendental en enoturismo, para seguir avanzando se necesita capacitación, estrategias, acciones claves a desarrollar para entrar a un mundo de competitividad. El programa académico de la Cumbre está pensado para ello y que la misma se realizara en nuestro país es un gran Orgullo y una gran oportunidad para todo el sector.

Se abordó la temática del paisaje del vino, expositores de diferentes países mostraron y contaron no solo el paisaje como lugar físico, sino las personas que viven allí, las actividades que desarrollan, la cultura del lugar, la relación entre la naturaleza y el hombre que transforma ese paisaje en constante adaptación.

La vid no es originaria de Uruguay, llego con los inmigrantes, lo que fue cambiando el paisaje. Es un negocio que no se puede trasladar, que tiene mucho arraigo en el territorio. La naturaleza y el paisaje son esenciales como punto de conexión para desarrollar el negocio, forman parte de la marca, el suelo y el paisaje es un patrimonio que debe estar protegido. El valor del vino, alimento, medicina, producto cultural, conecta con los grandes itinerarios del mundo. Utilizar la tecnología y la innovación pero que nos permita conservar y mantener la tradición

Paula Vila, jefa de enoturismo de INAVI, destacó que la cumbre, coloca a Uruguay en la cima del enoturismo, un sector que en los últimos dos o tres años crece a pasos agigantados. Muchas bodegas están empezando a trabajar el enoturismo, lo que permite darle continuidad al sector, casi el 100% de ellas pertenecen a familias convirtiéndose en un proyecto de vida, un legado por mantener.  Hoy nos encontramos con la tercera o cuarta generación de bodegueros, y si bien no todos los descendientes sienten el atractivo de trabajar en la bodega o el viñedo, si se encuentran atraídos por la gastronomía, marketing, turismo, lo que ayuda a que la familia siga con la tradición, continue el legado, incorporando nuevas técnicas, vinos elaborados de manera sostenible, orgánicos, mezclando tradición y la innovación. Esto involucra otras áreas sociales que se benefician con el crecimiento del sector.

El tradicional día del patrimonio que se celebra en octubre en todo el país, este año 2024 va a dedicar el mismo a un tema productivo e industrial: el vino en Uruguay, en honor a Vidiela y a Arriague pioneros de la vitivinicultura en Uruguay. Las dos jornadas del día del patrimonio se desarrollan en todo el país y son una oportunidad de abrir las puertas para recibir a los visitantes de manera gratuita y poner foco en la producción vitivinícola.

Se busca generar un ámbito de participación a nivel nacional, ayudar a trabajar mejor en el área desde la protección, asesorías técnicas, la mirada histórica, la arqueología industrial, las prácticas y saberes de las viniculturas que son patrimonio histórico, las prácticas de consumo, la ritualidad.

Este saber de generación en generación convive con el desarrollo tecnológico y científico y esos procesos de cambio en el mundo globalizado nos da la sensación de seguridad que muchas veces necesita la sociedad antes los procesos de cambio. Las fiestas relacionadas con la vendimia, la primera registrada en Uruguay es 1883 en una bodega en Villa Colon, celebraciones agrícolas, ritualidad, la reafirmación de comunidad.

Podemos ver el enoturismo como una oportunidad en cuanto al disfrute del patrimonio cultural que integra la gastronomía, la calidad de vida, los saberes tradicionales, la tecnología, el contacto con la naturaleza, el arte, la salud y la calidad de vida.

Para Maldonado concretamente es una oportunidad de que la temporada se extienda más allá de la temporada estival. En temporada baja se mantienen restaurantes abiertos, se hace enoturismo todo el año en varias bodegas del departamento, un fenómeno que hace años no ocurría. En definitiva, es una revolución de lo que está ocurriendo aquí.

La Intendencia Municipal de Montevideo y @vina_eden recibieron reconocimientos de la Organización Mundial de Enoturismo (OMET).

La próxima cumbre se desarrollará en la ciudad de Yantai, en la República Popular China.

José Antonio Vidal, anunció la creación por parte de OMET del Monitor Económico del Enoturismo Mundial, del sello OMET de calidad enoturística -que favorecerá al máximo la promoción de los productos enoturísticos para su comercialización-, la creación del market place del enoturismo internacional y la organización de eventos locales y mundiales. Asimismo cito a Dante Aliguiere quien decía; “el vino siembra poesía en los corazones”.

Valeria Patron

 

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